En esta serie de artículos lo cuento todo sobre la compra, mantenimiento y disfrute de mi Eunos Roadster, un Mazda MX-5 llamado Puck…
Hacía tiempo que no actualizaba este diario de mi MX-5 NA y me doy cuenta que la rehabilitación de nuestro Puck prosigue sin prisa pero sin pausa. Y también he notado que frente a las cosas básicas a las que hay que dar prioridad al principio (poner neumáticos nuevos, enderezar llantas, limpiar a fondo) poco a poco voy entrando en detallitos.

Así por ejemplo observando una y otra vez el coche me dí cuenta de que la placa identificativas (la matrícula, vamos) delantera estaba torcida y la trasera no estaba centrada en el hueco. Así que me he puesto manos a la obra y las he dejado donde a mi modo de ver deben estar. Lo malo es que en el proceso ha quedado a la vista en la parte delantera uno de los agujeros que se usaban antes (así de torcida estaba, sí) que he disimulado como he podido con un poco de masilla y pintura.
Seguidamente, le he instalado una antena, ya que uno de los anteriores dueños o dueñas tuvo la idea de cancelarla. Sin embargo, en mi ánimo está tener el coche como se fabricó allá por 1993 y además me parece que está más bonito con todos sus elementos originales en su sitio.

Como la luz antiniebla trasera, que por fin he puesto y de un tamaño adecuado, no como la primera que compré en internet que era enorme. Además, en la ITV tuvieron a bien indicarme que estaba en el lado equivocado: sí, en Gran Bretaña va más escorada a la derecha pero aquí lógicamente debe ir hacia la izquierda.

Seguimos con el cable que tensa el lateral del techo practicable en nuestro MX-5 NA. En mi caso el del lado derecho estaba roto y reparado cuando lo compré, aunque un poco de aquella manera. Como se ve en las fotos, instalar el cable nuevo no es cosa de pocos minutos pero en fin, de nuevo los tutoriales de internet son una bendición. La única peculiaridad a mencionar aquí quizás sea que se precisa de una remachadora para fijar un extremo a la estructura del techo.

La radio era otra de los “detalles” no prioritarios a los que más rabia le tenía. La que venía cuando compré el coche no funcionaba bien del todo y el color rojo de la iluminación se peleaba con el verde de la instrumentación del coche. Así que me he regalado por Navidad una nueva, que además tiene “bluetooth” para escuchar la música del móvil y poder atender llamadas. Y todo ello sin ofender demasiado la estética “años 90” del habitáculo.

Y ya voy terminando con los detallitos de los botones laterales de los faros antiniebla traseros, la regulación de la intensidad de la luz del cuadro de instrumentos y un botón sin función. De nuevo, en una vida anterior alguien había tenido a bien sustituir un par de ellos por interruptores cubres pero ahora quedan como salían de la fábrica de Hiroshima los MX-5 NA hace tantos años ya.
Por último, reseñar que he hecho cambiar la correa de distribución. La he cambiado ante la incertidumbre de no saber si/cuando se cambió la correa. Realmente, que se rompa en este modelo no supone un problema como en otros pero no me apetece quedarme tirado en un viaje. Por cierto, realmente debería pedir a mi tallerista de confianza que hiciera fotos de estas intervenciones, en fin, una vez más esto no lo puedo ilustrar.
DH
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