Películas y coches son una combinación irresistible, aquí va la segunda parte de una lista con las 30 mejores cintas de todos los tiempos…
En esta segunda parte os presento algunas de las mejores películas de coches de los años 70 y 80…
11. The French Connection (1971)
Obra maestra del cine de malos malotes, protagonizada por Gene Hackman, Roy Scheider y Fernando Rey y que incluye quizás la mejor persecución de la historia del cine, protagonizada por un Pontiac Le Mans del ’71 circulando desbocado por las calles de Brooklyn. Y si os gusta la música de los ’70, os dejo la anécdota más jugosa: el director, William Friedkin, hizo el montaje final de la persecución escuchando la canción “Black Magic Woman” de Fleetwood Mac – escuchadla antes y veréis como parece que los coches danzan al compás.

12. Two-Lane Blacktop (1971)
Film de culto de la contra-cultura americana con mensaje existencialista muy propio de las películas de coches de la época. Cuenta la historia de dos jóvenes californianos, un piloto y un mecánico, que recorren la icónica Ruta 66 por el suroeste americano a bordo de un Chevy del ’55 tuneado. Estrenada en España como Carretera Asfaltada En Dos Direcciones, esta joya estuvo mucho tiempo fuera de circulación debido a litigios legales por los derechos de la banda sonora, pero por fin está disponible para regodearse en la América profunda de antaño. Una road movie poco convencional pero (quizás por ello) muy recomendable.

13. American Graffiti (1973)
George Lucas se consagró con esta cinta, que le dio la reputación suficiente para lanzar contra viento y marea una historia épica ambientada en una galaxia muy lejana… Pero aquí la trama y el escenario son mucho más terrenales: en 1962 en un pueblo de California un grupo de jóvenes se dispone a pasar la última noche del verano antes de emprender su camino de adulto responsable – o no. Cuentan que la película salió adelante gracias al empeño de Lucas… y a que Francis Ford Coppola se unió al proyecto como productor: la banda sonora de 40 canciones que pretendía Lucas suponía un dineral en derechos de autor.

14. Smokey and the Bandit (1977)
Exitosa gamberrada a mayor gloria del grosero y bigotudo Burt Reynolds y de un Pontiac Firebird Trans Am, estrenada en España como Los Caraduras y en Sudamérica como Dos Pícaros Con Suerte. Dos camioneros sureños deben transportar un cargamento de cerveza pero por el camino recogen a una novia recién huida del altar y el novio al que ha dejado colgado es el hijo de un zafio sheriff que al enterarse de todo decide darles caza. Las ventas del Trans Am se duplicaron en el año siguiente al estreno, sobre todo en versión negro y dorado, claro.

15. The Driver (1978)
Vaya por delante que ésta no es una película fácil. Sobre el papel, El Conductor tiene los ingredientes adecuados: buenos actores (Ryan o’Neal e Isabelle Adjani), una trama con posibilidades y unas persecuciones vertiginosas. Pero en el otro plato de la balanza hay que poner una acción exageradamente violenta rodada de forma muy simple y sin adornos, como simples son los personajes y los diálogos: el protagonista sólo dice 350 palabras en toda la película. Pero a efectos de esta lista, cumple perfectamente… véase.

16. Mad Max (1979)
Cinta australiana de culto pero con gran éxito comercial: costó 350.000 $ pero acabó recaudando más de 100 millones de dólares y generando tres secuelas hasta la fecha. En una Australia distópica donde el bien más preciado es la gasolina, un (entonces) desconocido Mel Gibson emprende el camino de la venganza a bordo de un brutal Ford Falcon XB Coupé. Eso sí, si la queréis ver en inglés, aseguraos de verla en la versión original australiana: para el estreno en EEUU se temía que la audiencia americana no entendería el inglés con acento australiano y se hizo un doblaje que al parecer resultó penoso.

17. The Blues Brothers (1980)
Quizás desentone en esta lista una comedia musical, pero es que junto a Dan Aykroid y John Belushi esta peli la protagoniza el “Bluesmobile”, un desvencijado Dodge Monaco del ’74 que sirve a sus dueños de hogar provisional y para moverse por esas carreteras de Dios. Porque Granujas A Todo Ritmo (como se llamó en España) es también una cinta con un profundo sentir religioso, que llevó al periódico L’Osservatore Romano a incluirla en su lista de películas para buenos católicos. Sin embargo, esto no quita un ápice de transgresión a esta cinta, con 103 coches destruidos y ese presupuesto para cocaína para el rodaje…

18. Cannonball Run (1981)
La primera vez que vi esta peli allá por 1984 andaba yo en plena adolescencia y la escena inicial me dejó marcado: he aquí un Lamborghini Countach negro que llega tronando, se para en seco al lado de una señal de límite de velocidad, se baja una rubia despampanante con un spray de pintura, tacha el 55 que marca la señal, se sube al coche y sale zumbando con la policía pisándole los talones. Hoy en día naturalmente Los Locos Del Cannonball ya se ve con cierto escepticismo, la trama y los diálogos resultan zafios e inocentes pero de alguna manera aún tiene su gracia.

19. Christine (1983)
La combinación perfecta: Stephen King, el escritor de terror para consumo masivo y John Carpenter, el director de cine de terror, ambos unidos en una cinta sin pretensiones pero bien ejecutada, con una buenísima banda sonora. Una de las películas de coches más memorables por cortesía de un Plymouth Fury del ’57 con alma maléfica y un carácter muy vengativo. A los fans del Fury no les hizo ninguna gracia enterarse de que destruyeron 15 de los 25 que se usaron para hacer la película, aunque seguramente gracias al éxito de la cinta se salvaron muchos otros del desguace.

20. Tucker: The Man And His Dream (1988)
Diseñador de automóviles y emprendedor, en 1948 Preston Tucker lanzó su propia marca con la idea de ofrecer al público los coches más modernos y seguros del mundo. Lamentablemente por esa época las autoridades andaban vigilando muy de cerca a este tipo de “start-ups” y acusó a Tucker de fraude y aparte, se dice que los grandes fabricantes también hicieron de las suyas para evitar su éxito. Bien es verdad que para financiar su proyecto, Tucker recurrió a métodos poco ortodoxos pero en fin, Tucker: El Hombre y Su Sueño es una excelente, optimista, brillante y colorida película, con un Jeff Bridges en quizás su mejor papel.

Sigue esta lista de excelentes películas de coches en la tercera parte y si te la perdiste, consulta la primera…
DH
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